sábado, 6 de septiembre de 2014

HOMOSEXUALIDAD: "Ningún estudio científico ha probado que la homosexualidad sea genética", recuerda un prestigioso psiquiatra (1493)



ACI / ReL (11/8/2014): El Dr. René Flores, médico psiquiatra y fundador de la Sociedad Peruana de Sexología Médica, ha desmentido al conocido oncólogo Elmer Huerta, quien afirmó en una columna de opinión que la homosexualidad es genética.

El Dr. Huerta, oncólogo peruano que radica en Estados Unidos, es conocido en Perú por su frecuente participación en medios de comunicación. Inserto en el debate sobre la legalización de las uniones homosexuales en Perú, aseguró en el diario El Comercio que “para la ciencia la orientación sexual es genética”.

Un médico que desconoce el tema del que opina

Huerta calificó además a las “terapias de reconversión” como “una violación de los principios éticos de la atención de la salud e infringen los derechos humanos de las personas afectadas”.

“Esos ‘centros de cambio de orientación sexual’ son el equivalente moderno a las pateaduras que esos padres ignorantes propinaban a sus hijos al enterarse de que tenían una orientación sexual diferente, según ellos para ‘corregirlos”, escribió el médico.

Responde un psiquiatra experto

En respuesta, el Dr. René Flores, quien ha sido además jefe del Departamento de Psiquiatría de la Universidad Cayetano Heredia y Vice Decano del Colegio Médico del Perú, publicó un artículo titulado “La Ciencia Explica: El Dr. Elmer Huerta no sabe bien lo que dice”.

En él señala que “para empezar el título (de la columna original de Huerta) no debió ser ‘la ciencia explica’ sino la ciencia intenta explicar y no lo consigue. Esta fue una ocasión para que el Dr. Huerta hubiera sido más prudente y no afirmara cosas que están en pleno debate científico sin esclarecerse hasta la fecha”.

“Está claro que el colega no tiene la preparación para escribir sobre este tema. Este es un problema altamente especializado y es muy posible que el doctor no haya tratado a un solo homosexual en su carrera profesional”, señaló. Para el médico psiquiatra, la publicación de Huerta en El Comercio “tiene muchas imprecisiones, desinformación y afirmaciones que no tienen sustento”.

Éxito de la terapia de reorientación sexual

“Por ejemplo, no es cierto que esté comprobado que la terapia de reorientación sexual sea dañina para los pacientes. Una investigación del connotado psiquiatra americano Robert L. Spitzer demostró lo contrario en el año 2001”.

Spitzer, recordó Flores, “es muy conocido porque promovió la remoción de la homosexualidad de la clasificación de trastornos emocionales de la Asociación Psiquiátrica Americana, lo que se consiguió solo parcialmente. Después, en el estudio mencionado, debió retractarse”.

“La OMS (Organización Mundial de la Salud) en estos temas no es creíble, debe saberlo el Dr. Huerta, porque está manejada por los países ‘liberacionistas sexuales’ y la OPS (Organización Panamericana de la Salud) por los Estados Unidos con la misma visión ideológica. De otra parte, la sanción ética para quienes traten homosexuales hace tiempo que fue retirada, por conculcar la libre decisión de las personas”.

El Dr. René Flores precisó además que Elmer Huerta “se equivoca también al citar los estudios del ‘lnstituto de Genética Molecular…’ y la publicación de ‘Nature’ o cualquier otro estudio conocido, dado que ninguno ha podido demostrar el origen genético de la homosexualidad. Es posible que lo sea en parte, pero no está demostrado”.

“El Dr. Huerta no tiene idea de los tratamientos de los problemas de la orientación sexual y en su desinformación los compara con ‘pateaduras de padres ignorantes’. Está escribiendo sobre cosas que desconoce”.

Flores añadió que las “sociedades cerradas” a las que hace referencia Huerta “no son causa necesaria de los problemas emocionales de las personas con desórdenes de la orientación sexual. Hay un estudio en Holanda que pareciera demostrar que esos trastornos emocionales son concurrentes con el problema sexual”.

“Le diría al colega que tome nota de que la diversidad no es buena ni mala, ni enferma ni saludable. Hay diversidades de diferente signo, sanas y enfermas. Basta detenerse en los ámbitos de la biología, la bioquímica, la personalidad y la misma cultura”.

“¿Diría el colega que es buena o sana la diversidad de amputar los genitales a una mujer en los países del África?”, cuestionó Flores.

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