lunes, 6 de noviembre de 2017

LUTERO-5º centenario: la insólita alabanza al gran heresiarca asesino de almas. Lutero no buscaba la reforma del catolicismo, buscaba su aniquilación y a ello dedicó toda su vida tras ese 31/10/1517 (2720)

Luis Fernando Pérrez Bustamante
(31.10.17)
La fe católica es bella, es salvífica, es un tesoro divino, es un don de lo alto. Todo atentado contra la misma es un atentado contra el Señor.
Hoy se cumplen 500 años del inicio de uno de los más letales ataques contra dicha fe. Da igual que Lutero clavara o no las famosas 95 tesis, que por cierto, tenían muy poco que ver con la teología protestante que llegó después.
Poco a poco fue levantando el imperio de la herejía solafideísta -derribado con un solo versículo, Santiago 2,24- y, sobre todo, el libre examen, que es la fuente de todo tipo de herejías habidas y por haber, ya que anula la autoridad de la Iglesia a la hora de interpretar la Escritura.
Su objetivo fue claro:
  • Cuando hayamos aniquilado la Misa, habremos aniquilado el Papado en su totalidad.
  • Yo no impugné las inmoralidades y los abusos, sino la sustancia y la doctrina del Papado.
Por tanto, Lutero no buscaba la reforma del catolicismo. Buscaba su aniquilación. Y a ello dedicó toda su vida tras ese 31 de octubre de 1517
Es por ello que todo intento de encumbrar la figura de ese asesino de almas solo puede causar escándalo en los fieles católicos. Escándalo que puede presentar diversas caras. La primera, la de los poco formados en la fe, que desconocen la verdadera naturaleza de Lutero y se creen las mentiras que están contando sobre él desde la propia Iglesia. La segunda, la de los que saben la verdad sobre el heresiarca alemán y contemplan atónitos esta especie de exhibicionismo porno-espiritual al que venimos siendo sometidos desde hace años. Y podría hablarse de una tercera cara, que conozco bien. La de aquellos a los que el Señor rescató de la herejía protestante y los puso en el camino de la salvación que es la fe católica. En ellos la incredulidad compite con la indignación.
Son muchos los fieles que están prácticamente indefensos ante tanta maldad envuelta en buenas palabras y propósitos. La excusa de que hay que buscar la unidad de los cristianos es solo eso. una excusa. No se puede buscar la unidad ensalzando a aquel que la destrozó hace cinco siglos. Es como buscar la buena medicina en los experimentos del nazi Mengele. 
Parece, además, que los enemigos de la fe católica dentro de la propia Iglesia, están dispuestos a ofender de la peor forma posible a los que han cometido el “delito” ser ser católicos por la gracia de Dios. Esa es la única explicación al sello que va a emitir la Santa Sede con ocasión del V Centenario de la “Reforma”. En él se ve la Cruz de Cristo y a ambos lados figuran arrodillados Lutero y Melanchton. El primero tiene en las manos una Biblia -mutilada sin los Deuterocanónicos- y el segundo la Confesión de Ausburgo, primera exposición oficial de los principios de la nueva y falsa fe.
A los pies de la Cruz de Cristo estuvieron su santa Madre y el único apóstol que no le abandonó, no dos señores que, entre otras lindezas, justificaron la bigamia del príncipe alemán que les protegía, Felipe I de Hesse. Es decir, en esa tarea de alabar a los mayores enemigos de la fe católica, no dudan en profanar el sacrificio de Cristo. Y eso, desde las entrañas del Vaticano, cuya destrucción completa era el objetivo de Lutero.
Fue el beato Pablo VI quien dijo que el humo de Satanás se había infiltrado en la Iglesia. Hoy no solo se respira ese humo. Se ve claramente el fuego destructor que lo provoca. Un fuego que amenaza con llevar al abismo a millones de almas. Es por ello que debemos clamar, hoy más que nunca: “Cuéntanos Señor, entre tus elegidos”. Y también la oración que daba título a la bula que buscaba la retractación de Lutero: “Exsurge Domine” ("Levántate Señor"… y juzga tu causa).
Lutero, ¡Ese gran hereje!
El historiador Alberto Bárcena
analiza y desmonta la herejía luterana
La «reforma» luterana no fue una «mejora» sino una «ruptura» en toda regla, y una «página negra de la historia de Europa». En su esencia está «la soberbia, el pecado de Lucifer».
InfoCatólica-Alberto Bárcena (19/11/2017): El R. P. Remigio Vilariño Ugarte, sacerdote jesuita, en su célebre obra «Puntos de Catecismo», en el tomo I y en la página nº 11 dice: «porque los que le confiesan como Dios, y siguen en general su doctrina (se refiere a Nuestro Señor Jesucristo), pero no reconocen la autoridad de su Vicario el Papa, como los cismáticos, no son católicos, ni verdaderamente cristianos».
Martín Lutero reconoce que al fundar la herejía protestante echó por la borda la moral y la piedad que él mismo adquirió y ejerció en la Iglesia Católica.
«Verdaderamente, Lutero, dijeron de él, fue en extremo vicioso. El mismo Calvino escribió: ¡Pluguiese a Dios que se hubiera cuidado de refrenar la intemperancia que trasciende de toda su persona! ¡Pluguiese a Dios que se hubiera parado un poco a reconocer sus vicios!».
Entre los mismos reformadores protestantes había ya división:
  • Erasmo de Rotterdam, dijo de él: «Lutero empieza a perder las simpatías de sus discípulos hasta el punto que muchos de ellos le tratan de hereje, y afirman que despojado del espíritu del Evangelio, ha sido abandonado a los delirios del espíritu humano»
  • El mismo Zwinglio dijo de Lutero: «Ved cómo se esfuerza Satanás por apoderarse por completo de este hombre. No es raro el verle contradecirse de una página a otra. Al verle entre los suyos le creeríais poseído de una falange de demonios.
Rebelión del "1-Octubre" (2017)
Pacto Masónico "PP-PSOE" (2015)
Conspiración Masónica contra España (1717-2017)
Propuestas para Reformar la Constitución
Santiago "matamoros" en la batalla de Clavijo (año 859) 
Twitter: @Clavijo859
Investigador de la Conspiración Masónica-Liberal
para el "Nuevo Orden Mundial-Nueva Era" 
DIOS-Patria-Familia
Verdad-Justicia y Amor-Misericordia
2. Posts más Populares
3. Otros Posts Recomendados
8. Documentos Papales
9. Magisterio de la Iglesia Católica
Imprime esta entrada