jueves, 19 de noviembre de 2020

Diez certezas confirman la "PLANDEMIA". Nunca existió pandemia alguna, tan solo tiránica excusa sanitaria para apresurar las genocidas agendas del Nuevo Orden Mundial. Estadística anual de DEFUNCIONES desde 1987

Certezas que confirman la "PLANDEMIA"
18 NOVIEMBRE 2020

En 2020 los muertos serán unos 380.000,
del orden de 50.000 menos que en 2018,
porque el gobierno y la sanidad
han evitado contagios gripales y respiratorios.

Nunca existió pandemia alguna, 
tan solo tiránica excusa sanitaria para apresurar 
las genocidas agendas del Nuevo Orden Mundial. 
Plandemia, asunto diáfano, en diez puntos:

Los muertos de todos los años y mucha pasta en juego

1- No ha habido más muertes que otros años (página web de sanidad y el MoMo del Instituto Carlos III).

2- Según reseñas actualizadas del globalista Instituto Carlos III, todas las enfermedades de 2019 a 2020 se han "desvanecido" (entre un 20% y un 80%), sobre todo las enfermedades respiratorias. Estas últimas, todas ellas – repito, todas - han pasado a denominarse covid-19 a través de los falaces test.

3- Nuestro gobierno reveló el truco en el BOE (Real Decreto-ley 22/2020, de 16 de junio). Baldear pródigamente a todas las taifas: cuantos más "positivos" y más gente en las UCIs, mejor reparto y más ración de los 6.000 millones de Bruselas.

Dictadura sanitaria

4- Publicado en el BOE, Ley 3/2020, 18 de septiembre, apuntalando la absoluta dictadura de la mafia sanitaria. Los matasanos, rama forenses, decidirán arbitrariamente la causa de la muerte sin hacer autopsias hasta el 20 de junio 2021.

5- A los cadáveres de la presunta covid-19 se les aplicó el protocolo de cadáveres radiactivos en lugar de enfermedad infecto-contagiosa. De tal manera, se encubrieron sin disimulo alguno las verdaderas causas de los óbitos. En todo caso y circunstancia. Jamás virus, inquieran tóxicos diversos. Además de denominar Sars-Cov-2 a la gripe estacional, añadan planificado geronticidio de Estado.

Atiborrando artificialmente hospitales, creando terror televisivo

6- Se chapan intencionadamente ambulatorios para que la gente visite urgencias. Con dicho y malvado treta, ambicionada y obtenida saturación de hospitales.

7- Se cierran deliberadamente urgencias de varios hospitales de la misma ciudad. A continuación se aglomeran todos los pacientes en uno o dos. A la sazón, venden en los mass-mierda la simulada milonga de que los hospitales están abarrotados de gente.

8- Cajas tontas inyectando, en todo momento, pavor y pánico y terror entre los súbditos. Terrorismo informativo: todo lo que nos narran deviene negativo, grandes dígitos de fallecidos o enfermos, siempre nombrando a las naciones más "afectadas". Y a las “malvadas”. A saber, Usa y Brasil con sus “fosas”.

Timos científicos

9- Engañadores test PCR (los de anticuerpos/antígenos, más embuste aún). Confirmado fehacientemente que estos test no son específicos para detectar ningún virus. Lo asevera tanto la Organización Mafiosa de la Salud como la propia web de sanidad/enfermedad del ilegítimo gobierno español.

10. Para que un virus exista es indispensable que cumpla los postulados de Koch. El espectral Sars-Cov-2 no los cumple. Además, abundando, no existe un solo estudio o trabajo científico publicado y cotejado y confrontado por pares que demuestre que el Sars-Cov-2 ha sido adecuadamente aislado y purificado para proceder, posteriormente, a una rigurosa y exacta secuenciación genética de su ARN. China dijo haber secuenciado y aislado el virus, pero jamás lo demostró científicamente. Por lo cual, sin aislarse ni purificarse ni secuenciarse genéticamente, tal virus no existe. En fin.

Nacido en Bilbao, vive en Madrid, tierra de todos los transterrados de España. Escaqueado de la existencia, el periodismo, amor de juventud, representa para él lo contrario a las hodiernas hordas de amanuenses poseídos por el miedo y la ideología. Amante, también, de disquisiciones teológicas y filosóficas diversas, pluma y la espada le sirven para mitigar, entre otros menesteres, dentro de lo que cabe, la gramsciana y apabullante hegemonía cultural de los socialismos liberticidas, de derechas y de izquierdas.