El próximo 24 de Octubre
tercer aniversario del día de la gran infamia
20/10/2022
El 24 de octubre del año 2020, al cumplirse el primer aniversario de la profanación de la sepultura de Franco, El Español Digital publicó un artículo con el título de 24 DE OCTUBRE; DÍA DE LA GRAN INFAMIA (AQUÍ)
En el 2021, al cumplirse la segunda efeméride, volvió a recordarse la ignominia (AQUÍ) donde se hacía la conjetura de si la erupción del volcán de La Palma era un castigo divino por la vil canallada cometida. Y se apuntaba la posibilidad de que le siguieran nuevos castigos, como las Plagas de Egipto, hasta que el Gobierno de España no enmendara la profanación cometida restituyendo los restos mortales del Caudillo a su sepultura en el Valle de los Caídos de donde nunca debieron salir. Profanación cometida por un Gobierno infame y consentida, con inaudita inhibición, por unas Instituciones del Estado a las que por omisión alcanzaba -salpicaba- la inmundicia de la infamia cometida
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Fotocomposición original Col. Flores Thies +
También se apuntaba en el segundo aniversario la posibilidad de que habiéndose cumplido ya dos plagas (el Covid en el 2020 y la erupción del volcán de La Palma en el 2021) llegara en el 2022 una tercera. La más letal y devastadora, en forma de uno de los cuatro jinetes del Apocalipsis… la guerra. Que efectivamente ya cabalga en este tercer aniversario de la profanación de la tumba de Franco. Y si bien es cierto que aunque por ahora solamente esté teniendo lugar en el este de Europa, los efectos y consecuencias afectarán de lleno a España.
Finalmente decir que en el segundo aniversario, también se ponía de manifiesto que las cuatro Instituciones del Estado responsables de la profanación, por haberse inhibido en su obligación de evitarlo, habían sido La Iglesia, La Judicatura, el Ejército y la Corona, por lo que tras haberse hecho ya referencia a la Iglesia y al Ejército en el primer y segundo aniversario respectivamente, correspondería en este tercer aniversario de la profanación poner en la picota a la Judicatura. Dejando para el cuarto aniversario a la Corona… si es que hay lugar a ello, cabría decirse.
Y que cada uno interprete esto como mejor le cuadre. Bien porque con la defenestración del infame gobierno de Pedro Sánchez y la llegada al Poder de un nuevo Ejecutivo, se enmiende la vileza cometida y con ello finalice el castigo divino, o bien porque en el caso de ganar las próximas elecciones generales el Frente Popular (conjunción rojo-separatista en 1936 como ahora) cuando llegue el cuarto aniversario de la profanación el 24 de octubre del 2023, las Reales Personas hayan recibido ya un pasaje, gratis total, para Marsella. Vía Cartagena.
Y con ello Pedro Sánchez habrá hecho realidad su ensoñación de cada mañana. Cuando llega al éxtasis narcisista al mirarse al espejo y verse presidente de la tercera república española.
Cosa que no permita Dios… ni debemos permitir los españoles.
Esperemos que un nuevo Gobierno del Partido Popular, sostenido con la abrumadora e imprescindible fuerza política de VOX, o mejor aún, un Gobierno de VOX respaldado por el Partido Popular den la vuelta a muchas cosas. Deshaciendo entuertos y enmendando injusticias. Como la vileza cometida al profanar la sepultura de Franco. En definitiva, higienizando la política española, convertida en pocilga y patio de Monipodio.
Pero no adelantemos acontecimientos. Estamos en el tercer aniversario de la canallesca efeméride, y un año más las banderas de España deberán estar en posición invertida. Que no es señal de duelo, como la de media asta, sino testimonio de bochorno y vergüenza nacional. Y vamos a glosar, siquiera someramente, la ignominia que alcanza al Tribunal Supremo.
Original de José Luis Díez Jiménez +
No es posible por razón de espacio analizar en detalle la responsabilidad del Alto Tribunal en la profanación del sepulcro de Franco. Quien quiera conocer los entresijos de la gran prevaricación cometida, puede leer un artículo del eminente jurista Guillermo Rocafort publicado en El Confidencial Digital de 12 de octubre del 2019 y reproducido en la página 41 de su libro EL FRAUDE DE LA MEMORIA HISTÓRICA (SND Editores 2022)
O también, si se quiere conocer en un análisis pormenorizado la aberración jurídica cometida al allanarse el Tribunal Supremo a los dictados de un Gobierno -en funciones para más INRI- pisoteando los más elementales fundamentos del Derecho, encontrará un análisis riguroso de la prevaricación cometida en el libro FRANCO: CRÓNICA DE LA LUCHA CONTRA LA PROFANACIÓN DE SU TUMBA (SND Editores)
Como ya se ha dicho, no es posible exponer en detalle las irregularidades cometidas en la profanación del sepulcro de Franco avaladas por la Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo. Por ello nos limitaremos a reproducir unas consideraciones del citado libro, crónica de la lucha contra la profanación del sepulcro de Franco.
..Pocas veces he visto un ejemplo más claro de lo que puede ser una prevaricación judicial…
…La Sentencia Nº 1279/2019 de 30 de septiembre no sentará jurisprudencia, ni pasará a los anales de la historia judicial por su fundamentación jurídica…
…Por lo que pasará a la historia, pero triste, negra, inconfesable (es) actuando al dictado del poder político, como un tribunal popular, ajeno al rigor jurídico exigible Al dictarse una sentencia de “caso único”…
…Por razones inconfesables que imaginamos, ya sea por temor al “agit prop” mediático, ya sea por contentar a la izquierda revanchista, por prejuicios ideológicos de algunos magistrados o la cobardía de otros, ya sea por promociones políticas extrajudiciales, lo cierto es que los seis magistrados del Tribunal Supremo decidieron condenar a Franco a ser exhumado, sin posibilidad de inhumación donde deseara la familia…
…Merecen el demoledor reproche de cualquier jurista o ciudadano que todavía creyera en el estado de derecho. Han hecho señorías un daño infinito a la credibilidad de nuestros tribunales. Ni siquiera hubo un voto discrepante que salvara la dignidad moral y jurídica de la Sala. El pasteleo judicial tiene una originalidad conclusiva rayana a la prevaricación, consistente en que mientras señalan de manera pormenorizada que el Gobierno ha dictado todas las resoluciones sin apartarse de la legalidad en forma y fondo, reconoce que todas ellas tienen la singularidad de ser políticas Pocas veces he visto un ejemplo más claro de lo que puedes ser una prevaricación judicial…
…Finalmente decir que la resolución judicial, apartándose de su estricta función, cual es determinar si la exhumación es contraria a derecho o conforme a él, se permite decir que durante el Régimen de Franco no se respetó las división de poderes. Y lo manifiestan, precisamente, quienes son dirigidos por los partidos, ascienden por su confianza, y demuestran con esta sentencia su servilismo al poder…
Y podríamos añadir que solamente por esta última y acertada consideración, queda en evidencia el que la resolución judicial ha querido ser “políticamente muy correcta” y merecedora por ello de aprobación y recompensa profesional del Gobierno a los magistrados que la suscriben. Pero que pone de manifiesto la inaudita muestra de cinismo que contamina toda la sentencia.
Y una consideración final. Debemos tener en cuenta que el Tribunal Supremo, tan dado en demorar las sentencias durante años, en este caso ha resuelto los recursos presentados con la celeridad que le imponía el Gobierno. Refrendando la legalidad de la profanación de la tumba de Franco con la unanimidad ya apuntada. Declarando conforme a derecho, no solamente la profanación de los restos mortales de Franco (no otra cosa que profanación es la exhumación en contra de la voluntad de su familia y violando un recinto sagrado) sino el que también ha vulnerado su elemental derecho a la reinhumación en el lugar por ellos elegido. Permaneciendo actualmente los restos secuestrados por el Gobierno.
La resolución del Tribunal Supremo sobre la profanación del sepulcro de Franco es la gota que colma el vaso de la injusticia de la España Constitucional. Puede decirse que con ello el Estado Social y Democrático de Derecho, que se proclama nada menos que en el artículo 1 del título preliminar de la Constitución de 1978 resulta ser una milonga.
Una aberración legal por la que el Estado de Derecho, queda travestido en Estado de Deshecho.
Y en este tercer aniversario de la profanación de la sepultura de Franco, es justo y necesario que los magistrados que hicieron posible la ignominia salgan del anonimato de sus firmas y que el pueblo también les pueda juzgar:
Rodríguez Zapata Pérez
Menéndez Pérez
Murillo de la Cueva
Pico Lorenzo
Teso Gamella
Requero Ibáñez
Dios, y la historia de España, les harán justicia.