jueves, 1 de junio de 2023

La Masonería en la política: entrevistamos a Serge Abad-Gallardo

La Masonería en la política: 
entrevistamos a Serge Abad-Gallardo
 1/06/2023

Tras nuestro artículo publicado anteayer AQUÍ, Serge Abad-Gallardo ha tenido a bien concedernos una entrevista con la que nos ayuda a conocer aún más lo que de verdad es la Masonería.

Serge Abad-Gallardo

EED.- Los libros por usted publicados son ya seis. Dos de ellos en España. Y todos, aquí, en Chile, en Polonia y en Francia han tenido un éxito arrollador. El titulado «Politique et franc-maçonnerie, les liaisons dangereuses» (Editorial Artège), es decir «Política y masonería, las relaciones peligrosas», es el sexto, y cuyo título lo dice todo sobre su contenido mediante el cual aborda algo fundamental que son esas que usted denomina «relaciones peligrosas» entre la masonería y la política o cómo la masonería se implica e influye en la política. ¿Qué le llevó a escribir sobre tema actual, tan importante y tan difícil?

Serge.- Como explicaba con mucho realismo Ricardo de la Cierva, especialista español de la masonería, en su libro «Masoneria, Satanismo y Exorcismo» (Editorial Fénix), «Existe una campaña continua de relaciones públicas en la que se promueve esa gran mentira de que la Masonería no es una religión, sino solamente una organización social que hace buenas obras…». Pues bien, la masonería es realmente una religión que influye en las leyes nacionales. Pero dicha influencia es maliciosa y malvada. Como con tanto acierto lo aclaró el Papa León XIII, «un buen árbol se reconoce por sus frutos. Un árbol malo no puede dar buenos frutos…». ¿Y cuáles son desde su creación en 1717, hace ya tres siglos, los frutos de la masonería? Pues: la lucha en contra de Nuestro Señor Jesucristo y de la Iglesia católica, el laicismo agresivo, divorcio, aborto, matrimonio homosexual, eutanasia, mundialismo, globalismo, etc… y como demostración la cultura «woke». Todo lo dicho lo impone la masonería en la sociedad a través de la política y de la propaganda mediante los medios de comunicación escritos, televisivos, radiofónicos y, por supuesto, de las redes sociales e Internet. Por ejemplo, en Francia (e igualmente en España) un 80% de los periodistas son masones o próximos a la ideología masónica. ¡La gente no se da cuenta de la gran influencia que tiene la masonería en la sociedad por medio de la política!

EED.- Dice usted que la masonería es una religión. ¿Cómo lo demuestra?

Serge.- Vengo demostrando con mis libros que la masonería es, sin duda alguna, una religión. Los masones lo niegan, por supuesto. Sin embargo, los especialistas de las ciencias religiosas anotan cincos características que posee la masonería por las cuales podemos afirmar que la masonería es una religión: la primera característica es la existencia de un ideal común: la Masonería considera, según manifiesta, que ¡sólo la Luz Masónica lleva la felicidad a la gente! Además, la masonería posee también las siguientes características: Ritos, Ceremonias, Adeptos (miembros) y Relaciones entre los adeptos. ¡Estas cinco características están indiscutiblemente presentes en la Masonería! Por eso y por esas características, demuestro en este libro que las acciones de la masonería van encaminadas a ¡intentar imponer (¡y lo consiguen!), por medio de la política, una religión mundialista (globalista) masónica! Lo dice igualmente Ricardo de la Cierva cuando demuestra que la Masonería es una religión apostática, que impulsa a la apostatar del catolicismo (y de las otras religiones). Asimismo, como yo demuestro que la Masonería es luciferina (ver mi libro «Serví a Lucifer sin saberlo»), es fácil y obligado concluir que ¡la masonería es la religión universal de Satanás!

EED.- Entonces ¿cómo influye la Masonería influye en la política?

Serge.- Pues de varias maneras. La primera no me parece criticable, pues es el resultado de la actuación personal de cada masón. ¡Cada persona tiene derecho (¡y menos mal!) a reivindicar sus opiniones políticas! El problema viene cuando esas actuaciones, esas reivindicaciones, tiene por fundamento no su propia y personal opinión política, sino, como ocurre en el caso de los masones, se basa en una influencia esotérica que impregna por completo la mente de los masones. Cuando era aprendiz, el vigilante que se ocupaba de mi enseñanza me dijo que me daría cuenta de que, pasados unos cuantos años en la masonería, ya no podría ver el mundo como antes de ingresar en ella. ¡Y eso lo confirmo! Cuando salí de la Masonería necesité la ayuda de un sacerdote para orar a fin de liberarme; ¡y luego, además, un exorcismo con otro sacerdote para cortar definitivamente mi relación con los rituales masónicos que aún conservaba! Y es que la ideología masónica, con sus rituales y sus símbolos, influyen fuertemente en la mente de los adeptos. El segundo tipo de influencia de la masonería en la política es todavía más secreto y más antidemocrático. Se trata de un grupo secreto denominado la «fraternidad parlamentaria». Este grupo está constituido por parlamentarios masones de varias obediencias y se reúne en un lugar secreto. Un Gran Maestro del Gran Oriente de Francia confesó que «nuestros hermanos parlamentarios se dedican a ¡llevar a la Asamblea las propuestas elaboradas en las logias! Asimismo, el destacado masón e influyente político Henri Caillavet, que fue quien organizó en 1947 la «fraternidad parlamentaria», dijo «necesitamos crear un «caballo de Troya» para influir en la leyes, e imponer nuestras ideas masónicas». También, otro Gran Maestro (de la Gran Logia de Francia), dijo «lo que intentamos transformar es la sociedad. Y los hermanos de la Gran Logia fueron la causa de las transformaciones legislativas… la última que se ha propuesto es la de la eutanasia…». Un ex-presidente de esta «fraternidad parlamentaria» confesó que si desarrolla correctamente su papel, los parlamentarios masones de «derecha» tanto como de izquierda votarán juntos!». ¡En Francia un 40% de los parlamentarios son masones! ¡E influyen secretamente en la elaboración de las leyes ! En mi libro demuestro que nuestra sociedad está totalmente dirigida por la Masonería. ¡Y lo demuestro con mi testimonio (fui masón durante 24 años, llegué a maestro masón, fui también elegido Venerable Maestro, y estuve entre los más altos grados de la masonería antes de reencontrar la fe) y sobre todo con extractos de los rituales y las propias declaraciones masónicas ! Por ejemplo la masonería constituyó una «fraternidad» especial para ayudar a Emmanuel Macron durante las elecciones presidenciales del 2022. Además, las siete obediencias masónicas francesas declararon públicamente que ¡se tenía que votar a Macron y en contra de Marine Le Pen! ¡En mi libro cito dos testimonios según los cuales Macron es Masón! ¡No hay duda: las leyes que tenemos en Francia, (¡e igualmente en España! ) son masónicas! También hablo de la preocupación del Vaticano por ¡la importante presencia de la masonería alrededor de Macron!

EED.- Escribe usted que la masonería influye en la política desde la Revolución francesa de 1789

Serge.- ¡Por supuesto! La Masonería se encuentra en las origines de la Revolución francesa y desde luego su influencia en la política desde entonces no ha cesado; también en un periodo muy importante en el siglo XIX con la Tercera República. Pero también en el principio del siglo XX y del XXI con el Presidente François Mitterand, luego con François Hollande que, según testimonio de un Gran Maestro ¡es masón! Asimismo, la masonería se encuentra en las origines de varios acontecimientos revolucionarios españoles como fue la proclamación de la «Gloriosas» y, por supuesto, la guerra civil. En2008, un grupo de masones de la logia a la cual yo pertenecía en Narbonne ayudaron muy activamente a la logia «Derecho Humano» española a consolidarse en Barcelona. Se sabe que el movimiento de independendencia y constitución de una república catalana dirigido por Carles Puigdemont en 2017 fue obra de la masonería catalana. La actuación masónica se reconoce por una característica que está siempre presente tanto en Francia como en España: ¡la lucha violenta contra la Iglesia y su clero! Demuestro en mi libro que desde 1789, en Francia, la masonería se encuentra enraizada en el poder político. Todas las repúblicas y gobiernos franceses han estado siempre infiltrados por la masonería; cabe señalar también que mucho más en los gobiernos de izquierda. Cuando hablamos de izquierda o «derecha» hay que tener en cuenta que los políticos que pertenecen a la Masonería son, antes de todo, reformistas, progresistas, libertarios, mundialista, no pudiéndose realmente diferenciar entre los políticos masones de «derecha» o de izquierda.

EED.- ¿Por qué denuncia usted la influencia de la masonería en la política?

Serge.- Sobre todo porque las leyes de inspiración masónicas están se fundamentan en el esoterismo masónico; por supuesto secretamente. Hay que tener en cuenta que los rituales y enseñanzas masónicas son secretos. En mi libro doy varios ejemplos de esto. Hablemos de la cremación. Fue legalizada en Francia en el 1887 y no lo fue por iniciativa o petición popular. Hasta el comienzo del siglo XXI, fueron poquísimas las personas que incineradas. Dicha legalización fue consecuencia de una iniciativa de parlamentarios masónicos; para ello, presentaron la cremación y adujeron razones de higiene sanitaria. Pero todo fue una trampa. Demuestro en mi libro que la cremación está fundamentada en el ritual del grado 18 de los Altos Grados, y en el proceso iniciático que considera el fuego como purificante, mediante el cual se lleva al iniciado de vuelta al «Gran Todo Cósmico» (el Gran Arquitecto del Universo). ¡Hay que recordar que la masonería es luciferina, y que el fuego es el atributo del demonio! Para el ritual masónico, ¡el fuego es el medio alquímico que devuelve la materia a sus origines! Casi siempre la masonería actúa del mismo modo: intenta imponer en las leyes las utopías masónicas que nadie pide, y poco a poco difunden su ideología en la sociedad. No estamos en democracia. ¡El poder no pertenece al pueblo, sino a una minoría de iniciados que deciden lo que es bueno o malo para los demás! Es el resultado de un «convento» (asamblea general anual y secreta de una obediencia masónica) del Derecho Humano de principios del siglo XX, que quiere que las utopías masónicas se impongan en las leyes.

EED.- Mil gracias, Serge, no sólo por esta entrevista, sino también por tu valiente e imprescindible testimonio.