miércoles, 29 de julio de 2020

Masonería y Ocultismo. Satanismo en los Beatles


César Vidal

La Sociedad Teosófica no fue el único grupo ocultista nacido en el siglo XIX en conexión con personajes pertenecientes a la masonería. De hecho, un caso aún más acentuado es el de la Orden Hermética de la Aurora Dorada, o Golden Dawn, una denominación propia de la masonería y que incluso dio nombre a una de las primeras publicaciones de los testigos de Jehová. La Golden Dawn fue fundada en 1888 por los masones Samuel Liddell MacGregor Mathers y William Wynn Westcott, junto a William Robert Woodman. Westcott fue iniciado en la masonería el 24 de octubre de 1871, y ascendido a maestro seis años después. MacGregor Mathers, por su parte, fue iniciado el 4 de octubre de 1877.

La Golden Dawn tenía una cosmovisión totalmente ocultista que –no puede negarse– derivaba de la propia masonería. Como Pike, hacía referencia a la Cábala, a las religiones mistéricas del paganismo y al Antiguo Egipto. También, como Pike, sostenía la posibilidad de alcanzar un status divino. A todo esto añadía referencias al sistema mágico de Éliphas Lévi y un enorme interés por los grimorios medievales. Por la Golden Dawn pasaron personajes ilustres enormemente interesados en el ocultismo, como W. B. Yeats, Arthur Machen, A. E. Waite y Aleister Crowley, al que nos referiremos más adelante.

No menos importante que la Golden Dawn en la historia del ocultismo contemporáneo fue la Ordo Templi Orientis (OTO). Su fundación se debió también a un masón, en este caso de nacionalidad austriaca y de nombre Carl Kellner. En 1895 Kellner abordó el tema de la fundación de una Academia Masónica con su amigo Albert Karl Theodor Reuss, que había sido iniciado en la masonería el 9 de noviembre de 1876. Finalmente, ambos llegaron a la conclusión de que el nuevo colectivo debía ser denominado Orden Templaria Oriental, y que el círculo interior debía estar organizado en paralelo a los ritos masónicos de Menfis y Mizraim. Para entrar en ese círculo sería obligatorio el haber sido iniciado en la masonería, y las mujeres quedarían excluidas.

En 1902 la orden no sólo estaba funcionando, sino que incluso editaba una publicación masónica titulada La oriflama. En 1905 falleció Kellner, y Reuss asumió el control absoluto de la OTO. Cinco años después Reuss se encontró con Aleister Crowley y lo inició en la orden. Crowley es un personaje incómodo para muchos masones, dado que era un satanista confeso e incluso estuvo envuelto en la perpetración de sacrificios humanos. Sin embargo, lo cierto es que había sido iniciado en la masonería, y que sus credenciales debían de ser lo suficientemente sólidas como para que Reuss, en 1912, lo nombrara además Gran Maestre Nacional General X de OTO para Gran Bretaña e Irlanda.

Crowley comenzó a practicar los ritos de los grados inferiores con el nombre de Mysteria Mystica Máxima, o MMM, lo que no tardó en ocasionar protestas. Crowley no deseaba problemas legales y alegó que la OTO era una academia masónica pero no una orden masónica y, por lo tanto, no infringía "los justos privilegios de la Gran Logia Unida de Inglaterra". En 1913 Crowley introdujo la misa gnóstica en OTO, que debía corresponderse con la misa católica. No pocos interpretaron aquel acto como una misa negra, en la medida en que estaba destinada a maldecir a Dios más que a alabarlo.

La tensión iba a agudizarse en 1916, cuando Reuss, masón a fin de cuentas, revisó la constitución de OTO para enfatizar su carácter masónico. Al año siguiente la policía irrumpió en la logia de Crowley en Londres y la cerró, bajo el cargo de "predecir la fortuna", un delito que, muy sensatamente, figuraba en las leyes británicas.

Cuando concluyó la primera guerra mundial, Reuss siguió insistiendo en la autoridad masónica de OTO. En 1920 asistió al congreso de la Federación Mundial de la Masonería Universal, donde se planteó la posibilidad de que la misa gnóstica de Crowley se convirtiera en "la religión oficial de todos los miembros de la Federación Mundial de la Masonería Universal en posesión del grado 18". La propuesta fue rechazada, y al parecer Crowley intentó, en 1921, distanciar el grupo del control masónico; así se lo planteó a Reuss. Sea como fuere, lo cierto es que en 1922 Reuss se retiró y dejó el control de OTO en manos de Crowley como su sucesor oficial.

Crowley fue sucedido en 1942 por el alemán Karl Germer. La historia de Germer no deja de ser interesante, porque, al llegar los nacional-socialistas al poder en Alemania, fue detenido por hacer proselitismo masónico entre los estudiantes. Por suerte para Germer, sólo pasó recluido unos meses –meses en los que afirmó haberse encontrado con un ángel que le ayudó–, al cabo de los cuales fue puesto en libertad y pudo exiliarse a Estados Unidos. Sin embargo, el carácter político de OTO no debía de resultar muy claro, porque durante los años 1944 y 1945 sus logias fueron aniquiladas, pero por la Resistencia francesa. Dos años después Crowley fallecía.

La muerte de Crowley puso fin a una de las vidas dedicadas más intensamente a la causa del ocultismo; vida, dicho sea de paso, que no dejó de entrecruzarse con la masonería y los masones.

Icono de los Beatles en la portada del LP Sargeant Pepper, nacido el 12 de octubre de 1875 en Leamington Spa, Inglaterra, Edward Alexander (Aleister Crowley) era hijo de unos padres pertenecientes a los Hermanos de Plymouth, una denominación evangélica.

Crowley fue creciendo con un odio profundo al cristianismo, hasta el punto de que gustaba identificarse con el 666, el número de la Bestia del Apocalipsis. Estudió en Cambridge, y en 1898 fue iniciado en la Golden Dawn.

Crowley no tardó en desilusionarse con la Golden Dawn, y en 1900, estando en México, fue iniciado en la masonería, según él mismo relata en sus Confesiones.

En 1903 se casó con Rose Kelly y marchó a Egipto, para pasar la luna de miel. A inicios de 1904, encontrándose en El Cairo, Rose comenzó a entrar en trance y a decir a su marido que el dios Horus deseaba hablarle. Dado que Rose no había tenido previamente este tipo de experiencias, Crowley la llevó al museo Boulak y le pidió que le señalara al dios en cuestión. La mujer se detuvo ante una estela funeraria donde aparecía Horus y que estaba numerada con el 666.

Del 8 al 9 de abril de 1904 Crowley recibió una revelación, a la que daría el nombre de "Liber AL vel Legis", o Libro de la Ley, inicio de la era de Horus, que sería gobernada por la ley de Thelema (la palabra griega para voluntad). Esa ley podía resumirse en la fórmula: "Haz lo que quieras". Antes de que concluyera el año Crowley fue iniciado en la logia anglosajona n. 343, que desde 1964 se encuentra bajo la jurisdicción de la Gran Logia Nacional Francesa de París como n. 103. Se iba a producir entonces un acontecimiento, según Crowley, que tendría enorme importancia.

Dos años después Crowley se hallaba en Gran Bretaña, con la intención de crear una orden mágica que debía seguir los pasos de la Golden Dawn y que recibió el nombre de AA, por Astron Argon o Astrum Argentium. En 1910, como ya vimos, Crowley se integraba en OTO, la orden creada por masones, y, por tercera vez, entró en contacto con la masonería, esta vez en la persona de John Yarker, que le confirió los grados 33, 90 y 95 del antiguo y aceptable rito de Menfis y Mizraim [1].

En 1920 Crowley fundó la Abadía Thelema en Cefalú. Sin duda, es éste uno de los episodios más turbios de su vida, ya que los niños desaparecían de los alrededores y se pensó que perecían en misas negras celebradas por Crowley. Nunca pudo demostrarse, pero el episodio concluyó con su deportación de Italia. Durante los años siguientes Crowley se definiría claramente no como luciferino sino como satanista, circunstancia que, de manera un tanto llamativa, no implicó la ruptura de relaciones con OTO y sus dirigentes.

No sólo eso. Además, trabaría amistad con un personaje llamado a tener una importancia no pequeña en la historia de las sectas. Nos referimos a Ronald L. Hubbard, el fundador de la Iglesia de la Cienciología.

Hubbard estaba muy vinculado en 1945 con John W. Parsons, que presidía el capítulo de OTO en Los Ángeles [2]. Hubbard fue, de hecho, un miembro de la secta de Crowley, donde, por añadidura, conoció a su segunda esposa. La Iglesia de la Cienciología, comprensiblemente, ha intentado negar este hecho, insistiendo en que Hubbard sólo se estaba infiltrando en el grupo de Crowley. La verdad es que, en una serie de conferencias del curso de doctorado de Filadelfia, grabadas ya en 1952, Hubbard se explayó hablando del ocultismo en la Edad Media y recomendó un libro: The Master Therion, de Crowley. Según Hubbard, "es una fascinante obra en sí misma, y esa obra fue escrita por Aleister Crowley, el difunto Aleister Crowley, mi muy buen amigo" [3].

Realmente, hay episodios en la Historia –como el de la influencia de los masones en el desarrollo del ocultismo contemporáneo, cuyas raíces últimas y cuyas consecuencias postreras cuesta imaginar. Pero que, en cualquier caso, no es lícito ni eludir ni ocultar.

[1] Un buen estudio sobre los repetidos contactos de Crowley con la masonería, en M. P. Starr, Aleister Crowley: Freemason!, Ars Quatuor Coronatorum, vol. 108, 1995.
[2] R. Miller, Bare-faced Messiah, pp. 112-130.
[3]. Ron Hubbard, Conditions of Space-Time-Energy, cassete 18 5212C05.

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