miércoles, 25 de noviembre de 2020

Van a tener que matarme si quieren vacunarme...y venderé cara mi vida

Van a tener que matarme 
si quieren vacunarme...y venderé cara mi vida
25 NOV 2020



¿Pueden obligarnos a vacunarnos? 

Primero, dejen que comience a carcajearme ante su ininteligible y estúpida pregunta. La respuesta es demasiado obvia. Pueden obligarnos a lo que les salga de la punta del pitín ¿Pero no se han enterado todavía de que en España nuestros derechos y libertades fundamentales se hallan absolutamente pulverizadas? ¿Continúan sin percatarse de que la poca libertad que existía antes de marzo en España, definitivamente, ha muerto?

Perdida la batalla de los bozales, ¿ganaremos la de las vacunas?

¿Culpo al ilegítimo gobierno? ¿Culpo a la siniestra oposición, parlamentaria y extraparlamentaria? ¿Culpo a los mafiosos jueces? ¿Culpo a los genocidas Gates y a Soros? ¿Culpo a los que se hallan muy por encima de ellos en la Pirámide de Poder? ¿Culpo a FARMAFIA? ¿Culpo a García Ferreras y demás censores, la inmensa mayoría de los mass-mierda? ¿Culpa a milicos y maderos? ¿Culpo al criminal y narcoterrorista CNI, formado en su mayor parte por los citados y traidores milicos, utilizando a la sazón a ELISA de puta alcahueta y huelebragas?

No. Sí y no, digamos. TE CULPO A TI. Por sumiso. Por anestesiado. Por adormecido. Por permitir que te pongan un bozal en la boca y no reaccionar. Por consentir que tus hijos o nietos vayan al colegio con una mordaza tóxica y asfixiante y no decir ni mu. Por “alejarte” de tus congéneres y asumirlo con "naturalidad". Por adaptarte a la injusticia. Por tolerar el mal.

Sencillo de comprender. Ya que la batalla sobre los bozales la han ganado ellos, a ver si ésta la ganamos nosotros. No podemos permitir que NADIE nos meta un repugnante brebaje en nuestro cuerpo contra nuestra voluntad. Y esta batalla puede ser vencida. Por ejemplo, según las medios de infoxicación oficiales, más de un 47 % de españoles se negaría a inyectarse esta nueva mierda por lo que podríamos razonablemente inferir, basándonos en la tendencia al embuste de este tipo de prensa, que la cifra real probablemente sea mucho más elevada. Mucha gente, incluso feroces covidiotas, posee dudas.

Vacunas: tóxicas, letales, transgénicas

Todas - repito, todas - las vacunas contienen elementos altísimamente tóxicos. Y gravísimos e irreversibles efectos adversos. Incluso con sus célebres diez años de pruebas, las vacunas "clásicas" devienen, en el mejor de los casos, inútiles (en multitud de casos, generando la enfermedad que pretendían "inmunizar"). En el peor, letales. Cientos de sentencias judiciales durante los últimos decenios han condenado a FARMAFIA dando la razón a millones de afectados.

Pero la nueva vacuna contiene ARN mensajero. Material genético artificial dentro en nuestras células, modificando irreversiblemente nuestro genoma y sendereando el primer paso hacía el transhumanismo, una de las humedecidas fantasías de las oscuras y genocidas élites que impulsan, promueven y diseñan toda esta paranoia plandémica.

Y no olviden el totalitario sistema de rastreo y escaneado de vacunas mediante la marcación corporal (proyecto impulsado por Bill Gates y el MIT). Y no se olviden del microchip implantable financiado por la DARPA yanqui. ¿Alguien puede creerse que se puede “crear” una vacuna contra un "patógeno" cuando no se dispone de muestras aisladas, purificadas y rigurosamente secuenciadas del mismo? ¿Qué clase de patraña es ésta?

La vacunación, pretexto. Verdadero objetivo, inocularte un chip. Además de esterilizarte. Y, recuerden, que FARMAFIA ha exigido a los distintos y criminales gobiernos planetarios en los respectivos contratos no tener que indemnizar a nadie en el caso de que surjan los habituales y atroces destrozos - con resultado de muerte - que irán surgiendo entre los que hayan decidido vacunarse. Blanco y en botella, suele ser leche.

NO, NO, NO. ¿Qué parte del NO continúas sin entender?

Digan NO. No hagan de ratones de laboratorio. Desobedezcan. Sean dignos. De su estirpe, de su patria, de su humanidad. La vacunación que pretenden todos los gobiernos mundiales deviene brutal agresión contra nuestro ser, contra nuestra libertad, contra la verdad.

Yo lo tengo claro, cristalino. Mensaje al ilegítimo - de origen y de ejercicio - gobierno nacional y mafiosas autoridades sanitarias, y demás chusma: métete tus experimentos poblaciones (con pretextos sanitarios) por donde te quepan, no pienso inyectarme jamás esa basura, bajo ningún concepto ni circunstancia. Y además me declaro en insurgencia total y absoluta. Decir NO, rotundo e insurgente, a una aberración sanitaria impuesta por los multimillonarios propietarios de los “productos de salud”, y que les permite seguir con su fraudulento negocio, con sus crímenes de lesa humanidad, manteniendo a la despistada población ignorante, confundida y enfrentada, mientras obtienen ciclópeos e inmorales beneficios. Y siempre machihembrado aliados al opresor Leviatán.

Varios tragos es la vida, un solo trago la muerte

Vas a tener que matarme para poder meterme ese brebaje, y no les quepa la menor duda de que venderé muy cara mi vida, tan cara, que me aseguraré de que no les compense. Humano nací y humano moriré. Piénsatelo antes, porque no soy el único, cada vez somos más. Todo ser humano tiene el derecho, innegociable e intransferible, a decidir sobre su cuerpo y su salud. Como estime oportuno y pertinente. Como persona libre y soberana. Y si alguien intenta violarlo tendrá que asumir las consecuencias. El derecho penal lo llama “defensa propia”. Yo lo llamo “justicia por la mano”.

Y terrorista autoridad, te aclaro. La justicia por la mano caminará hasta las últimas consecuencias. Centenares de miles de personas -y cada vez serán más - están reaccionando – y seguirán haciéndolo - a las mentiras y el comportamiento criminal de sus gobiernos y sus cómplices. Y manifestándose en las calles de todo el mundo contra la PLANDEMIA, contra los ocultos (a veces, entrevistos) objetivos de control y reducción de la población, contra sus eugenésicas agendas, contra el negocio y la imposición de decisiones sobre nuestra salud y exigiendo que se depuren responsabilidades y que se conozca la verdad … pero ellos la niegan, la verdad. 

Ellos, obviamente, además de colaboracionistas, son los NEGACIONISTAS. Lo dicho, niegan la verdad. Interrumpir la terrorista campaña del miedo poblacional constituye el primer paso para revertir la pestilente marea. Y que luego crezcan las aguas y sumerjan todo este sitio infestado de ratas. Y vosotros, gallifantes en general, infinitamente más ratas que las ratas, a hacer submarinismo con ellas. Por toda la eternidad.

Siempre contra todos – todos – los tiranos, se disfracen como se disfracen

Y si tu maquiavélico plan consiste en prohibirme todo (trabajar, viajar, comprar...), o encerrarme en algún campo de concentración, hasta el final. Morir, tan solo un suspiro. Pero hasta el último momento, me tendrás en frente y de frente sin haber aceptado una sola orden injusta en toda mi vida.

Y poco me importa morir con cuarenta tacos si bien y orgullosamente fueron vividos. Lo que no haré jamás será vegetar. Ni someterme a un tirano. Sic semper tyrannis. Antes muerto que sencillo. Y sabes que no estaré solo. Y buscaremos alternativas. Jurídicas, incluso. Resistir sin parar. Contra la tiranía del Nuevo Orden Mundial. La historia continúa sin estar escrita. En fin.



Nacido en Bilbao, vive en Madrid, tierra de todos los transterrados de España. Escaqueado de la existencia, el periodismo, amor de juventud, representa para él lo contrario a las hodiernas hordas de amanuenses poseídos por el miedo y la ideología. Amante, también, de disquisiciones teológicas y filosóficas diversas, pluma y la espada le sirven para mitigar, entre otros menesteres, dentro de lo que cabe, la gramsciana y apabullante hegemonía cultural de los socialismos liberticidas, de derechas y de izquierdas.