“Felipe y la computadora”
Es un juego literario de gran calidad con un enigmático mensaje (¿amenaza?) a Felipe González para que no olvidara que debía el poder a los masones del congreso de Suresnes (1974), al “harakiri” de las cortes de Franco, al golpe político del 23/F (1981) y, especialmente, a los grupos mediáticos de Polanco y Asensio.
Clavijo, editor de este blog, puede aportar un testimonio directo sobre una portada de “Cambio 16” meses antes de las elecciones, que pronosticaba 200 diputados para el PSOE. La encuesta estaba firmada por una prestigiosa empresa de estudios sociológicos de matriz francesa. La exactitud de la predicción, descartando la “bola de cristal”, apunta a una conexión entre la encuesta y el recuento de votos de los ordenadores (¿pucherazo electrónico programado?). Tal coincidencia es altamente improbable en base a la teoría matemática de las desviaciones en la medición de fenómenos aleatorios.
Vicent escribió: Un dios rubio gordinflón come palomitas de maíz asomado al ventanal del piso 72 de un rascacielos de Nueva York. Desde allí divisa La Meca, controla la venganza de Pinochet y la gomina del último general argentino, regula las tripas de Ariel Sharon en Israel, etc. Sentado en su mesa acaricia el globo terráqueo mientras sus órdenes, apoyadas de cerca por la VI flota, llegan a Portugal, cruzan España, pasan por Italia y Grecia y se ramifican por los países árabes.
Diálogo en el “triángulo” de las computadoras
-¿Cree usted que Felipe González lo sabe?
-¿Quién se ha encargado de aleccionarle?
-Procure que no se salga de la “ética”.
-Nuestro criado Willy Brandt se ha encargado de todo.
Todavía hay muchos patriotas que no se han enterado de que la patria es un oleoducto y buscan un salvador de opereta. No saben que los gobiernos no son más que estaciones de seguimiento que gestionan el paso de las multinacionales.
Sorprende que Juan Luis Cebrián, habitual participante del Club Bilderberg y responsable ideológico del periódico "El País", permitiera estas veladas amenazas a Felipe González, vendido como producto moral (100 años de honradez socialista). La verdad es que fue invitado por el dios del triángulo a sentarse frente al piloto automático en una Terminal de Occidente y obligado a implantar los designios del “Poder supranacional en la sombra”.
Fuentes:
-Ricardo de la Cierva
-Manuel Guerra
-Ricardo de las Heras
Kissinger por España
El 22 de septiembre de 1973, Kissinger fue nombrado Secretario de Estado en la administración Nixon. El 6 de octubre estalló la guerra del Yom Kippur y el 10 de diciembre recibió el Premio Nobel de la Paz. Pasados nueve días llegó a España para entrevistarse con Carrero Blanco, que murió asesinado pocas horas después. A partir de ese momento las relaciones de Kissinger fueron muy distendidas con España y su influencia decisiva en el pilotaje de la transición española, especialmente por su relación posterior con Felipe González. [...]
[...]En una de las frecuentes visitas posteriores de Kissinger, un periodista le preguntó por su parecer sobre España, a lo que respondió con su habitual franqueza: “me parece un país de excelentes camareros”. Y es precisamente a esta expresión que hacía referencia Ibarretxe, argumentando de una forma un poco torpe que Euskadi había conseguido evitar con tenacidad el profundo proceso de desindustrialización que la dupla Kissinger-González hicieron sufrir a España.[...]
[...]En 1977 el embajador de EEUU en España Wells Stabler preparó la visita de Felipe González a EEUU para que se entrevistara con el Vicepresidente Walter Mondale, el Secretario de Estado Cyrus Vance y otras autoridades e instituciones, con una conferencia en el CFR (Council on Foreign Relations), una cena organizada por el Carnegie Endowment for International Peace y una entrevista personal con David Rockefeller. El periplo americano fue realmente satisfactorio, pues González recibió de diferentes instituciones americanas 12 millones de dólares para que comenzara a estructurarse el PSOE como opción política viable.[...]
González recibe a Rockefeller
El presidente del Gobierno, Felipe González, recibió ayer 26/4/1983 en un desayuno de trabajo, al financiero norteamericano David Rockefeller. En la conversación, que duró una hora aproximadamente, estuvo también presente el ministro de Economía y Hacienda, Miguel Boyer. Fuentes de la Presidencia del Gobierno indicaron que el encuentro tuvo un carácter de conversación genérica, sin tratarse ningún tema de forma particular.La presencia de Boyer fue explicada por las mismas fuentes dada la personalidad de Rockefeller, en cuanto miembro de primera fila del mundo económico internacional. No obstante, en la conversación se trataron diversos temas en general. Entre ellos las fuentes citaron la situación en América Latina y el próximo viaje de Felipe González a Estados Unidos.