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martes, 11 de febrero de 2020

La revuelta comunista de Chile destruye su historia, derribando más de 400 estatuas de conquistadores españoles: Pedro de Valdivia, Diego de Almagro, Francisco de Aguirre..

Estatua de Pedro de Valdivia, conquistador de Chile
La revuelta comunista destruye la historia de Chile 
y derriba estatuas de conquistadores españoles
11/2/2020

Según datos oficiales del gobierno de Chile, 421 de los 669 monumentos nacionales del país han sido destruidos, derribados o dañados durante las revueltas comunistas que han asolado el país en los últimos meses. Las víctimas principales han sido las iglesias del país, pues el odio antirreligioso de los manifestantes ha sido notorio, pero también han sufrido graves daños una multitud de estatuas y monumentos conmemorativos, representativos de la historia del país.

Los monumentos que representan a conquistadores españoles han sido blanco especial de los terroristas callejeros. Han sido destruídas las estatuas de Pedro de Valdivia, conquistador de Chile, en las ciudades de Temuco, Cañete, Valdivia y Concepción (aunque la policía pudo evitar la destrucción de su estatua en Santiago de Chile). También fue derribada la estatua de Cristobal Colón en la ciudad de Arica. La estatua de Diego de Almagro, conquistador español y primer explorador de Chile fue derribada en Santiago. También fue derribado en la ciudad de La Serena el monumento del conquistador español Francisco de Aguirre, conquistador junto a Valdivia de Chile y del norte de Argentina.

La estatua de García Hurtado de Mendoza, gobernador español de Chile en el siglo XVI que luchó contra la rebelión de los mapuches o araucanos también fue derribada. En algunos casos las estatuas de conquistadores españoles han sido reemplazadas por figuras indígenas ya que el indigenismo es una obsesión para la izquierda radical en Hispanoamérica actualmente. La estatua de García Hurtado de Mendoza fue sustituida por una gran figura que representa a una india “diaguita” (los diaguitas o calchaquíes fueron unos indígenas de lo que hoy es el sur de Chile y el norte de Argentina que lucharon contra el Imperio español en lo que se conoce como “Guerras Calchaquíes”, entre 1550 y 1667).

Pero la furia iconoclasta de los conmilitones del siniestro Rodrigo Lanza no se ha detenido en la historia colonial española de Chile. Tampoco los héroes nacionales propiamente chilenos se han librado. Han sido atacados o derribados un gran número de monumentos que representan a figuras históricas del Chile independiente dado que los violentos no se identifican con el patriotismo chileno sino con un indigenismo radical. Además muchas de estas estatuas son de militares, colectivo al que ellos también odian.

Así pues ha sido destruido en las ciudades de Santiago, Antofagasta y La Serena el busto de Bernardo O Higgins, principal caudillo de la independencia de Chile contra la Corona hispánica, También han sido atacadas las estatuas de los héroes militares chilenos de la Guerra del Pacifíco (1879-1881). La Guerra del Pacífico fue un gran conflicto armado en el que Chile derrotó a la coalición formada por Perú y Bolivia (que perdió entonces su salida al mar). Esta guerra siempre ha sido considerada como el momento más épico de la historia del Chile independiente.

En la ciudad de Temuco ha sido destruída la estatua del comandante Arturo Prat, héroe naval chileno de esta guerra (por cierto su abuelo era catalán de Sant Feliu de Guíxols). También fue derribada la estatua de Carlos Condell, también marino chileno destacado en esa guerra y la estatua de Aníbal Pinto, presidente de Chile en esa época. En la ciudad de Arica ha sido destruído también uno de los monumentos más queridos de Chile, el que representa a los llamados “Héroes del Morro de Arica ” (soldados chilenos que vencieron al ejército peruano en otra batalla de esa misma guerra).

También fueron destruídas las estatuas de figuras políticas prominentes de la historia de Chile independiente como la del presidente Manuel Montt (1851-1861), la de Cornelio Saavedra, que anexionó definitivamente el territorio mapuche a Chile en el siglo XIX o la del empresario y terrateniente también del siglo XIX José Meléndez, al que acusan de haber expropiado gran cantidad de territorio a los indígenas. Su estatua ha sido sustituida por una figura que representa a Caupolicán, líder de los mapuches que luchó contra los conquistadores españoles en el siglo XVI ( de hecho es uno de los protagonistas del famoso poema épico “La Araucana” sobre la conquista española de Chile, de Alonso de Ercilla)

Los portavoces oficiosos de los violentos han señalado que solo han pretendido” corregir la visión oficial de la historia de Chile, basada en los militares y las clases explotadoras”. Un ajuste de cuentas en toda la regla con toda la historia de Chile, de la que la izquierda radical ya abomina en bloque, no solo el periodo colonial hispánico sino incluso el de Chile independiente. Su ideal al que volver es el indigenismo previo a la Conquista española.

Ese es el demencial ideario de la izquierda radical latinoamericana actual, con la que tan buenas relaciones mantienen el PSOE y Podemos.

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