El #ExpedienteRoyuela es verdad y va a acabar
con el sistema, así funciona,
mentira, codicia e impunidad
Enrique de Diego
3/11/2021
He de reconocer que me resultaba difícil creer que lo que se conoce como el #Expediente Royuela fuera verdad. Mejor se llamaría el Expediente Mena. Es un reto a la imaginación que en la Fiscalía de Cataluña el fiscal José María Mena organizara una banda de criminales que han cometido más de 2.300 asesinatos, que en esa organización participara la Policía Judicial, Rafael García Ruiz y Juan Manuel García Pena, otro fiscal, que llegó a ser el fiscal anticorrupción, suprema ironía, Carlos Jiménez Villarejo, el director del Instituto Forense, Josep Arimany Manso. El Diestro ha demostrado ser más diestro. Eran tan pulcros, tan progres, que quien iba a pensar que eran unos psicópatas de tal calibre, sin escrúpulos morales. Luego, está implicada toda la plana mayor del PSOE, en primer plano, Margarita Robles, bien conocida en estos lares por haber organizado una trama para robar bebés en beneficio de “parejas” suficientemente progres y bien situadas.
Margarita Robles, una pésima jueza, al frente de la Defensa.
Además, el sistema había actuado como siempre, cerrando las puertas con estrépito fingido, a los intrusos denunciantes, a los que se habían atrevido a difamar a tales próceres; incluso llegaron a meter en prisión a Alberto Royuela, con lo que eso tiene, en apariencia, de infamante. Luego pusieron el ministerio de la verdad, con su trituradora: todo eran bulos, En un momento dado, parecieron unos frikis aireando una novela de terror que no iba a ninguna parte, con la Justicia concediendo impunidad a los patentes asesinos y ladrones, porque son riquísimos, como para estar en la lista Forbes, de los más ricos del mundo y de España. El crimen sale, a lo que se ve, muy rentable.
Pero hete aquí que el #ExpedienteRoyuela es todo verdad, está documentadísimo, de puño y letra de José María Mena, y que, mira por donde, va a acabar con el sistema, El #ExpedienteRoyuela da para varias novelas policiacas. José María Mena era accionista, socio de una clínica criminal de abortos, la del Dr. Carlos Morín. Los que se dedican al aborto, so capa de progresismo, son unos completos psicópatas. No he conocido este dato, definitivo, hasta hace poco. Mena tenía allí un despacho donde mantenía un escrupuloso archivo con sus fechorías. Con la minuciosidad del psicópata y la profesionalidad de Fiscal. Todo, todo, todo. Las cuentas de donde salía el dinero y en las que entraba. Los inmuebles que cada uno de la organización criminal había adquirido y tenía en propiedad en Francia y Estados Unidos. Quien encargaba los crímenes y quien los pagaba, con un eficiente equipo de cobro de morosos.
El Director de los forenses catalanes cambiaba la causa de la muerte, la policía científica hacía desaparecer pruebas, la policía bloqueaba las denuncias de los familiares y varios magistrados de las alta instancias catalanas bloqueaban las denuncias. Mena hizo millonarios a todos, en pago de sus servicios, como confirmó la Agencia Tributaria en 2004.
Cuando el Doctor Morín entró en problemas policiales y se dictó un registro, Mena dio orden de que sacaran de allí todo el archivo; los papeles comprometedores, que eran todos. Mientras se procedía al encargo, alguien llamó al patriarca de los Royuela y se los vendió por 80.000 euros, de los de entonces. Cuando se disponía a ir con su coche a recogerlos, el vendedor le dijo que trajera un camión, tal era el volumen de lo que allí se guardaba. Al patriarca de los Royuela la banda de criminales le había matado un hijo. Así que hasta la clínica abortiva se desplazó un camión, lo cargaron y partió rumbo a algún punto ignoto de Francia, poniéndolo a buen recaudo.
No perderse entre tanto crimen documentado ha sido una proeza épica, ordenarlos, una epopeya. Ese trabajo ya está hecho. Han formado un equipo ganador, con el juez Fernando Presencia y con el eficiente colaborador de Rambla Libre, Javier Marzal, presidente de ANVIPED. Tienen clara la estrategia y van a por todas; anuncian bombazos inminentes; levantada de alfombras malolientes de tanta putrefacción como acumulan. En sus manos, los Royuela tienen la documentación de la trama y los van hacer caer uno tras otro. Dicen que la venganza es un plato que se come frío y éste está ya helado. Es la hora de la justicia.
La trama funciona mediante la mentira, la codicia y la impunidad. Tres ingredientes que, a gran escala, vemos en el genocidio de las timo vacunas. Mentira, llamando vacuna, a la inyección letal; no reconociendo los crímenes, prometiendo pinchazo tras pinchazo. Codicia a espuertas por parte de las farmacéuticas: el genocidio como gran negocio. Y, sobre todo, impunidad, concedida por el Gobierno, que no se mantendrá en el futuro. El #ExpedienteRoyuela es, a pequeña escala, un experimento, un ejercicio de psicópatas progres, que incuba el genocidio actual, que nos ha abierto la imaginación para entender que los crímenes de Mena y Villarejo fueron verdad, y está documentados; que las grandes fortunas amasadas están ahí con pelos y señales; y que la impunidad ha durado demasiado y es ofensiva. A todos nos va mucho en que el #ExpedienteRoyuela vaya a buen puerto y se lleve a este sistema corrupto y podrido por delante.
