EN LA MEDITACIÓN DE "LOS DOLORES DE LA SANTÍSIMA VIRGEN" HALLARÁS UN TESORO ESCONDIDO PARA TU VIDA.
La Santísima Virgen acepta benignamente y con singular amor cualquier acto devoto que los fieles practiquen en honor suyo: pero sobre todo se complace en verlos tomar parte en sus DOLORES. Esta devoción es tan grata a María, que viéndola casi olvidada en tiempo de Santa Brígida, se quejó de tal olvido con estas sentidas palabras:
"POCOS SON LOS QUE MEDITAN MIS DOLORES".
Este SANTO EJERCICIO DE DEVOCIÓN MARIANA se puede hacer estando de rodillas ante una imagen de María Santísima y continuar con una oración preparatoria y seguidamente los 7 DOLORES DE LA SANTÍSIMA VIRGEN.
Sé apostol de las VIRTUDES MARIANAS DE LA VIRGEN SANTÍSIMA. Imítala