El cisma alemán, la nueva masonería y la nueva Iglesia
Eulogio López
8/3/20 20
Los pesaditos obispos alemanes siguen tocando las narices
Su peor ‘pecado’ no está en el celibato o la ideología de
género sino en la comunión a los protestantes.
El propio Vaticano se vio obligado a aclarar que no, que no había acuerdo alguno con el Gobierno. Los obispos alemanes, aún dirigidos por el cardenal de Munich, Reinhard Marx, uno de nuestros peores ciudadanos, continúan dando la lata.
Su peor ‘pecado’ no está en su empeño en terminar con el celibato o la obsesión por introducir la ideología de género sino en la ‘protestantización’ de la Iglesia, es decir, una especie de régimen asambleario que ya se sabe donde acaba: en la profusión de iglesia, grupos y sectas pero que, a día de hoy, se concreta en ofrecer la comunión a los luteranos. Curioso, porque los luteranos no creen en la transustanciación. Pero ya se sabe: se trata, principalmente, de fastidiar.