La Masonería regresó a ESPAÑA
a la muerte de Franco
25-enero-2011
Antonio Villar ingresó (1972) en la logia “Unión Hispana” de París, perteneciente a la Gran Logia de Francia, gracias al apoyo del Gran Oriente Español (GOE) en el exilio mexicano.
Cuando la masonería reapareció públicamente en España (1977), Villar fue designado “Gran maestro”. Martín Villa en el Ministerio del Interior denegó la legalización pero el abogado y ex-ministro Ruiz Giménez consiguió una sentencia histórica (1979) a favor de la masonería.
El Gran Oriente Español anunció la decisión de defender el orden público y ser leal a la Monarquía, lo que provocó la escisión de los masones más republicanos, naciendo la Gran Logia Simbólica Española, de obediencia al Gran Oriente de Francia. Otro grupo constituyó (1982) la Gran Logia de España.
La Internacional Socialista, restablecida (1951) después de la II Guerra Mundial gracias a los fabianos (laboristas ingleses), se orientó según las directrices masónicas del CFR norteamericano (Consejo de Relaciones Exteriores).
Felipe González fue elegido secretario general del PSOE en el congreso de Suresnes (1974), último del exilio, con la oposición de Llopis y Tierno Galván pero apoyado por la Internacional Socialista, siendo su mentor Willy Brandt, canciller alemán del partido socialdemócrata (SPD).
La gestora que confirmó a González en el congreso extraordinario estuvo formada por Ramón Rubial, Antonio García Duarte, Carmen García Bloise, José Prat y José Federico de Carvajal, los tres últimos masones; Carvajal fue pagado (1982) con la presidencia del Senado. Otros masones del felipismo son: Luis y José Antonio Yáñez, Eduardo Martín Toval, José M. Calviño (Director de TVE), Joan Majó (Ministro de Industria), Julio Feo (líder de los fontaneros de la Moncloa) y otros con parientes masones: Félix Pons, Gregorio Peces Barba, Miguel Boyer, etc.
La revista “Contrastes” ya informó (1974) que los tentáculos de Rockefeller por medio de los Garrigues controlaban el mundo empresarial español.
Julián Lago entrevistó (1979) a Ramón Tamames en la revista “Interviú” del grupo Zeta propiedad del masón Antonio Asensio, manifestando que la oligarquía financiera española obedecía las directrices de Rockefeller, patrón del CFR, Bilderberg y Trilateral.
La Trilateral decidió (1983) la desastrosa reconversión industrial de España; en su viaje de vuelta a USA, Rockefeller hizo escala en Madrid para visitar a González y Boyer en la Moncloa, con la consecuencia del cierre de astilleros, siderúrgicas, etc.
Fuente: Ricardo de las Heras. La trama masónica (2010)
