Marruecos, nuestro “aliado” más peligroso (II). La situación militar. La evolución a través del tiempo
Coronel Manrique
20-9-2020
La Marcha Verde (Laissa en clave de la CIA), se hizo con la bandera norteamericana al frente
Continuamos con el estudio de cómo se ha llegado a la actual situación de inferioridad militar de España frente a Marruecos. Esto, unido a nuestros problemas de cohesión interna (separatismos galopantes), a la bancarrota económica propiciada y buscada con la excusa del síndrome de la enfermedad `Covid 19´, al previsible aumento y agravamiento de los conflictos sociales (inmigración incluida), y al actual “proceso constituyente” de voladura de la Constitución, probablemente augura una confrontación bélica que sería, sin duda, desastrosa para España.
En busca de la Inferioridad Militar con Marruecos
En 1975, cuando se produjo el suicida abandono del Sáhara, propiciado por las potencias sajonas y Francia, es decir, con el nacimiento del nuevo régimen político español, el potencial militar español era incomparablemente superior incluso al conjunto de Marruecos y Argelia. Y mencionamos Argelia explícitamente porque también nos invade descaradamente con inmigrantes y ocupa nuestras aguas en Baleares. Precisando más, se podría decir que ambas naciones magrebíes carecían de marina y aviación frente a unos poderosos Ejércitos Españoles de Mar y Aire, además de un Ejército de Tierra con la mejor organización y medios, comparativamente, en muchos siglos. En 1976 el Ejército del Aire contaba con 38.100 hombres, la Marina con 40.500 y el Ejército de Tierra con 275.600, estos últimos organizados en Fuerzas de Intervención Inmediata y de Defensa Operativa del Territorio (DOT), con nueve (9) divisiones o unidades de entidad similar (acorazada, mecanizada, motorizada, de montaña, Ceuta, Melilla, Baleares y Canarias), y un total de 24 brigadas de infantería -12 DOT- [i]. Además, España era prácticamente una potencia nuclear y contaba con incipientes misiles de largo alcance, además de tener una amplia y moderna industria militar.
El “inyector de satélites” Capricornio, fácilmente transformable en misil superficie-superficie, según publicaciones de la época.
Aquel traidor abandono de la provincia del Sahara Español, a cuyos nativos indignamente nos seguimos negando a reconocer la ciudadanía española, supuso el comienzo del engrandecimiento militar de Marruecos. Y eso que, según la CIA, Marruecos estuvo perdiendo la guerra contra el Frente Polisario hasta que Estados Unidos, Francia y Arabia Saudí y otras naciones intervinieron en su ayuda, entre ellas España con algo más que pecados de omisión.
Haciendo un repaso rápido de nuestra agonía militar, recordemos que el Presidente Aznar (PP), presionado por los separatistas catalanes (Pujol, CiU), anunció en 1996 la inconstitucional `suspensión´ del Servicio Militar Obligatorio, la cual se hizo definitiva realidad en 2001. Para entonces ya solo quedaban ocho brigadas. Pronto siguieron, en cascada, otras drásticas reducciones, especialmente en el Ejército de Tierra: Planes META (1983), RETO (1990), NORTE (1994), etc. El ingenio español los bautizó como “Mejor Estaba Todo Antes, Reducción de Unidades Tendentes a 0, y Nos Ordenan Reducir Terminantemente Esto”, a la vez que preveía otros nuevos: SUR (Supresión Unidades Restantes) y ESTE (Eliminación Sistemática de Todos los Ejércitos), en fiel reflejo de una realidad cada vez más trágica.
Desde la ocupación del Sahara gracias a nuestra traición, repetimos, Marruecos empezó a recibir ayuda militar, aunque al principio encubiertamente y siempre impulsada por Usa, como en el caso de Jordania, quien en 1976 cedió 26 cazas F-5 y 16 obuses de 155. Durante los años de construcción por Marruecos del `muro´ de 2.700 km en el Sáhara (1981-87, con el asesoramiento israelí), más de 13 naciones le ayudaron militarmente frente al Polisario. En 1981, antes de finalizar la construcción del primer tramo del muro, Marruecos adquirió 770 millones de dólares de armas, la mayor cantidad en los dieciséis años de guerra. Tras el alto el fuego de la guerra Marroquí-Saharagüi/Argelina en 1991, ¡después 16 años de guerra!, el siguiente record de compra de armas ocurrió el año 2011: 1.403 millones de dólares, de ellos 722 a Francia.
También nosotros ayudamos a Marruecos desde su independencia hasta hoy mismo, como se verá más adelante.
Cuando la ocupación marroquí de Perejil (2002), la situación militar había cambiado drásticamente, aproximándose los ejércitos argelino y marroquí al nuestro. En aquel año, Marruecos adquirió medio centenar de carros de combate T-72 en Bielorrusia y recibió 20 cazas F-16 regalados por Arabia Saudita. Por entonces, tras una concienzuda y permanente política de destrucción de nuestras fuerzas armadas, llámenla `deconstrucción´ si quieren, la cual está documentada en nuestro libro Ejércitos Anulados, se habían reducido radicalmente los efectivos y el presupuesto, prácticamente no se contaba con reservas ni humanas ni materiales, y nuestra industria militar había sido arrasada y privatizada (vendida al extranjero en gran medida). Incluso en algunos aspectos tecnológicos nos superaban ya los magrebíes, como los cohetes de artillería de campaña, sector en el que nuestra investigación, desarrollo y fabricación había sido puntera, vendiéndose a Gabón los últimos Teruel en 2011, de la mano del Ministro Morenés (PP), y sustituyéndose “por la nada”.
En 2004 la OTAN concedió a Marruecos el estatus de Aliado Importante No-OTAN (MNNA, como Israel y otras 15 naciones), al serlo de Usa. Esto le permitió en el futuro modernizar sus F-5 la versión Tiger III y comprar F-16 C/D Block 52 y su armamento lanzable (misiles aire-aire AIM-120 y AIM-9X/X2, bombas guiadas, misiles AGM-84 Harpoon antibuque, AGM-88 Harm antiradar y AGM-158 JAASM de crucero), entre otras ventajas.
El “Plan de Organización del Despliegue de la Fuerza de los Ejércitos, la Armada y la Unidad Militar de Emergencias”, aprobado en el año 2006 a propuesta del Ministro José Bono (PSOE), terminó en 2009 y supuso la supresión de 41 de las 195 unidades tipo batallón de infantería residuales del Ejército de Tierra. En Ceuta y Melilla se suprimieron dos Banderas de La Legión, dos compañías de defensa contracarro, dos batallones de transmisiones, un grupo de artillería de costa, dos baterías de adquisición de objetivos de artillería de campaña y dos planas mayores regimentales de ingenieros. En 2005 vendimos a Marruecos, “a precio simbólico” (¿1€?), una veintena de carros M-60 A3 (al menos, pues hay rumores de que hubo más entregas), y un simulador de instrucción/combate, precisamente de los de las guarniciones de Ceuta y Melilla; estos carros pertenecían a los ¡310! que nos había endosado Estados Unidos en 1992 por el Tratado FACE, y su derivado TLE, y que habíamos tenido que recomponer y actualizar a nuestras expensas; carros, por cierto, que no se podían emplear en la defensa de esas ciudades sin el permiso de OTAN, una organización que tampoco ampara esa parte de nuestro territorio nacional.
Y mientras el PSOE reducía nuestras fuerzas frente a Marruecos, también acariciaba la traicionera idea de cosoberanía con él: Máximo Cajal, representante personal de Zapatero para la Alianza de Civilizaciones y asesor suyo, así lo publicar en su libro Ceuta y Melilla, Olivenza y Gibraltar. ¿Dónde acaba España? (2003), en el que defendía entregar a Marruecos Ceuta y Melilla antes incluso de reclamar Gibraltar. Aunque, haciendo bueno eso tan viejo de que no hay nada nuevo bajo el Sol (Eclesiastés 1, 9), hay que recordar que el ex-rey emérito, quien en vida del Generalísimo Franco, y siendo aún príncipe heredero, entregó el Sáhara cediendo, repetimos, a las presiones yanquis (Aquí, Aquí y Aquí), también se había manifestado dispuesto a entregar Melilla y Ceuta (Aquí, Aquí y Aquí). Por cierto, el tándem Fraga-Verstrynge propuso lo mismo en su momento.
En la Directiva de Defensa Nacional de 1996 (DDN 01/96) ya no se mencionaron ni el Estrecho ni sus zonas de influencia. El 1 de enero de 2010 despareció el Mando de Artillería de Costa (MACTAE), unidad emblemática para la defensa y el control de los accesos al Estrecho de Gibraltar por cuyas aguas pasan anualmente más de 90.000 buques, algo más del 10% del tráfico marítimo internacional. La nada, de nuevo, sustituyó a las numerosas unidades de artillería cañón, muchas de ellas con alcance sobre los vecinos ingleses y marroquíes. En 2012 desapareció la centenaria Comandancia Militar del Campo de Gibraltar.
En 2010 España estaba a la cola del gasto en Defensa entre los países desarrollados, con un desembolso, en relación con el Producto Interior Bruto, casi la mitad que Francia, Italia o Gran Bretaña. Y en 2011, recién admitida, por fin, la situación de crisis económica, ya se hicieron drásticos recortes en el presupuesto. Por si alguien quiere profundizar en la situación de las FAS, puede leer el trabajo del Coronel Candil titulado “Desidia, Incapacidad e Incompetencia”. Respecto a la moral de sus componentes, según trabajos tales como El Síndrome de Militar Quemado Teniente Coronel Pedro Baños y otros), en aquellos años ya se estaba a punto de llegar a una parálisis de todo el sistema defensivo por ese motivo.
Mientras tanto, el gasto militar marroquí había ido creciendo exponencialmente desde 2008, hasta alcanzar en 2014-2015 un 3’8% de su PIB, manteniéndose luego por encima del 3%, es decir, cerca de 3.500 millones de dólares al año, mientras en España no se llega al 1%. En 2012 Marruecos dio un salto definitivo en la zona del Estrecho con la activación de su gran base naval en Alcázar Seguer (y Aquí), frente a Tarifa-Gibraltar (a 10 km de Ceuta), capaz de recibir la por entonces en construcción fragata FREMM de factura francesa y las tres corbetas SIGMA de origen holandés. España antes, entre los años 1980 y 1983, había entregado cuatro patrulleros medios lanzamisiles tipo Lazaga y una corbeta tipo Descubierta.
A lo anterior hay que sumar al continuado rearme del numerosísimo y muy fogueado Ejército Marroquí (cazas F-16, obuses autopropulsados M-109 modernizados, lanzadores de cohetes múltiples superficie-superficie AR-2 chinos con 70 km de alcance, lanzamisiles antiaéreos autopropulsados Tunguska-M1 y remolcados Hawk, radares AN/MPQ-64F1 Improved Sentinel, y un largo etcétera. Todo ello con el apoyo norteamericano, francés y de la Liga Árabe comandada por Arabia Saudí. Hay que recordar que el Africom, Mando Norteamericano en África, estuvo previsto asentarse en la Tam-Tam/Tarfalla de la antigua África Occidental Española.
Los 400 Abrams useños de Marruecos, unidos a los 150 VT-1A/T-90II chinos (evolución del T-72/80/90 ruso) y T-72 rusos, superan nuestros 200 Leopard en número, siendo, además, más recientemente modernizados/fabricados los carros marroquíes.
A finales de 2013 se dio de baja el portaviones Príncipe de Asturias por falta de presupuesto para una modernización que podría alargar su vida 20 años más; fue sustituido un año antes por el buque de asalto anfibio Juan Carlos I, si es que un barco del tipo del segundo puede sustituir a un portaviones en sus misiones. En 2014 la Armada dio de baja 14 barcos de un total de 25 en dos años y una cuarta parte de sus aviones de combate de despegue vertical (Harrier; aquellos que no nos quiso vender Inglaterra y hubo que comprarlos a EE.UU.). El presupuesto de Defensa fue mermado en un 32% desde el inicio de la crisis económica, de forma que el 77% se destinó a pagar las nóminas del personal; y se aceleró y amplió la desamortización o mal venta de infraestructuras (todas las casas militares, prácticamente todos los hospitales, todas las baterías de costa, numerosísimos cuarteles, polvorines y campos de tiro, casi todas las fábricas militares, etc). En la Pascua Militar de aquel mismo año 2014 se habló de “mantener solo el 10% de sus actuales mínimos Ejércitos listos para el combate”; a pesar de ello, muy pocos días después el Ministro Morenés se atrevió a decir (que) “estamos alcanzando un límite de calidad que no ha tenido en toda su historia, ni por la calidad humana hasta los medios que tiene. … los grandes programas de armamento que se hicieron hace unos años han permitido unas FFAA como nunca las han tenido su historia” (¡manda muchos… eso!), palabras que no solo eran excusa, sino intencionada adormidera para permitir seguir desangrando nuestra defensa nacional, pues las amplió diciendo “los militares han de mantener la calma ante quienes ponen en cuestión la unidad de España”.
1720: El Farnesio carga contra la artillería inglesa que apoya el cerco de Ceuta. 2015: Soldados marroquíes en Gibraltar, antes de unas “maniobras conjuntas” en Marruecos. Inglaterra siempre ha apoyado al Reino Alahuí.
Volviendo a la Marina, desde la última crisis económica (2008) ha dado de baja 27 buques de diversa envergadura y sólo ha incorporado nueve, solo hay un submarino operativo y al S-80 ni se le espera tras sus escandalosos diseños y costos. Y los Harrier restantes están a punto de ser dados de baja.
El Ejército del Aire no está mejor, y, además de muchos accidentes de vuelo achacados a la obsolescencia, los cazas F-18 de Canarias necesitan una más que urgente renovación: adquiridos de segunda mano hace 30 años (1986), se habla nebulosamente de que nos serían entregados 20 Tifón-Eurofighter en 2025 … si se compraran el año que viene con un irrisorio presupuesto de manos del Gobierno social-comunista (durante el primer semestre de este año Sánchez prácticamente ha reducido un tercio las inversiones en Defensa respecto al primer semestre del año anterior).
La situación ha continuado empeorando considerablemente, pero puede decirse que hace un lustro se sobrepasó el punto de no retorno, precipitándose España a una inferioridad militar descarada no solo frente al conjunto de Marruecos y Argelia (seis submarinos, dos de ellos con capacidad de lanzar misiles mar-tierra, misiles Iskander con alcance a la Península, cazas furtivos Sukhoi 57, misiles antiaéreos S-400, etc), sino incluso con relación a Marruecos individualmente.
En 2012 Usa aprobó la exportación de 200 carros de combate Abrams M1A1 para el ejército marroquí por 890 millones de euros, carros que, tras ser rechazados algunos y añadido otro lote de 50, quedaron en 2015 en un total de 222. También ese año adquirió un lote de 54 VT-1A chinos. Marruecos recibió sus primeros carros Abrams en 2016 y, aunque inicialmente el Presidente Trump se mostró enemigo de Mohamed VI por su apoyo a Hillary Clinton, en seguida siguió y aumentó las ventas de armas dado el extraordinario volumen de los pedidos marroquíes: más de 3.500 millones de dólares en dos años. En 2018 aprobó la venta de otros 162 de esos carros por más de mil millones de euros, por lo que Marruecos al menos dispone de 384, todos reacondicionados a “kilómetro 0” y modernizados.
Marruecos cuenta con dos satélites de vigilancia construidos y lanzados por Francia, adquiridos por 500 millones de euros y puestos en órbita en 2017 (Mohamed VI-A) y 2018 (Mohamed VI-B). Pueden fotografiar franjas de hasta 800 kilómetros de amplitud con una resolución inferior a un metro.
Satélite Mohamed VI, tipo Pléiades francés.
El presupuesto de defensa marroquí se calcula que alcanzará los 4.270 millones de euros en 2020 (10.200 millones € es el monto del español prorrogado de 2018), y el de 2021 alcanzará el 12% de los presupuestos generales, comparativamente unas seis veces más que el nuestro.
Y las compras, que se detallarán más adelante, siguen a pesar de la crisis económica, social y política de este país de 34 millones de habitantes que disfrutan de los más bajos repartos de riqueza en relación con su PIB, y con millones de emigrantes fuera de sus fronteras: tres millones según la ONU, casi el 10% de su población, prácticamente la mitad en España (un millón oficialmente, más los ilegales en continuo aumento, la nacionalidad más numerosa).
Y, para más inri, una parte considerable de nuestros escasos medios están permanentemente “civilizados” en misiones de protección civil en la UME, nuestros misiles antiaéreos Patriot andan por Turquía acechando a los aviones rusos, nuestros cazas Tifón por el Báltico en similar plan, y muchos de nuestros barcos de guerra y unidades terrestres enmarcadas en diversos dispositivos y escenarios internacionales o preparándose para ellas.
[i] César Ruiz-Ocaña: Los Ejércitos Españoles, Pag. 324, Editorial San Martín, Madrid, 1980.
José María Manrique (Burgos, 1949), coronel de artillería retirado (1968, 2005 reserva por edad). En la forzada situación de reserva por edad a los 56 años fue escribiendo la historia española y universal especialmente del S. XIX en adelante, así como la metahistoria.