Vacunas: toda la FARMAFIA
al servicio del genocida Bill Gates
Por Luys Coleto
10 JUN 2021
La Fundación Bill y Melinda Gates dilata narcótico e incuestionable papel de liderazgo en el desarrollo de la política sanitaria mundial: es el principal financiador y principal impulsor de la Alianza para las Vacunas (GAVI), en palabras del propio Bill Gates “la mejor inversión que hemos hecho”, una “asociación público-privada” entre la Organización de Mata Sanos y la brutal industria de las vacunas.
Bill Gates es el que manda de verdad
Desde luego, este no el único vínculo de la Fundación Gates con las vacunas ya que igualmente tiene una estrecha relación con las cardinales compañías farmacéuticas (Pfzizer, AstraZeneca, Moderna, Johnson&Johnson, Merck&Co y GlaxoSmithKline…) de algunas de la cuales es generoso inversor y financiador. El objetivo de la Fundación es propagar la vacunación obligatoria a lo largo y ancho del planeta. Al mismo tiempo estas nucleares piezas de FARMAFIA pertenecen a mega-conglomerados capitalistas que gobiernan el mundo imponiendo incuestionadamente sus políticas genocidas. Un delegado de la Organización Mafiosa de la Salud señaló a la sazón que Bill Gates “es tratado como un jefe de Estado, no sólo en la OMS sino también en el G20”.
La Fundación Gates posee el monopolio absoluto en el campo de la denominada salud pública. Gigantesca empresa multinacional, controla, inspecciona, fiscaliza cada etapa de la cadena de suministro, producción y distribución de vacunas y demás drogas (las llaman medicamentos) hasta que llegan nosotros y especialmente a los pobladores más desposeídos y saqueados de las aldeas africanas y del sureste asiático. Gracias a su poder, Bill Gates pudo lanzar en sus días un minucioso y detallado plan de financiación de vacunas, que inevitablemente transfiere fondos públicos a manos privadas mediante la subvenciones estatales a determinados medicamentos que la feroz propaganda farmacéutica se ha encargado de convertir en necesarios.
Gates, mediante este diabólico y hábil proceso, ha anegado África de vacunas, literalmente desbordada con la mierda vacunera de este psicótico desgarramantas, algunas de ellas con consecuencias y efectos tan devastadoress como la vacuna combinada conocida como DtwP-hepB-Hip (para la prevención de la difteria, el tétanos, la tosferina, la hepatitis B y el Haemophilus influenzae B9 que causó en 2002 diversas reacciones adversas y la muerte de 25 niños en Sri Lanka y la India). Gates vende estas vacunas a precios abultadísimo, sabiendo a la perfección que serán subvencionadas por el Estado. Y sus marionetas corruptas de turno.
Bill Gates, el amo del mundo (uno de ellos)
El proyecto de Gates, hegemonía del mundo, bajo la excusa de la filantropía, construcción de un mundo tecno totalitario. Bajo el dominio de la Salud pretende conseguir el dominio absoluto de la población. Gates no es ningún filántropo es un neomalthusiano que pretende reducir la población más pobre (y de paso, la más rica) y es un ferviente defensor de la eugenesia aunque siempre se encubra tras el afable velo del humanitarismo. Un paradigmático ejemplo es la vacuna anticonceptiva Depo-Provera que fue inoculada a cientos de mujeres en Ghana sin que estas conociesen los efectos anticonceptivos de esta vacuna y la continua propaganda anticonceptiva para evitar la reproducción de la población africana.
Detrás de estas campañas y vacunas anticonceptivas también está la organización eugenésica estadounidense Rebecca Project, dato clave. Existe una guerra por el control de la natalidad en África, una atroz guerra eugenésica. Otros proyectos de Bill Gates y la tecnocracia para dominar el mundo son los gen drives (impulsores genéticos) e ID2020 (identificación electrónica). Ambos asuntos, inescindibles de la vacunación universal y obligatoria. El ceñidísimo e irrompible vínculo entre la vacunación internacional, la tecnología 5G y el transhumanismo.
Los impulsores genéticos: otra forma de desguazar nuestro sagrado ADN
A saber, los impulsores genéticos son una técnica de ingeniería genética con la que Bill Gates pretendía, en principio, acabar con el mosquito transmisor de la malaria. Sin embargo los gen drives, en puridad, son una técnica para modificar y alterar el ADN de poblaciones enteras, de esta forma poder controlar la población. Un impulsor genético es una secuencia genética cuyo propósito es imponerse ventajosamente (por medio de la reproducción sexual) a través de una población de organismos, transfiriendo un rasgo genético particular a toda o a la mayoría de su descendencia, mediante esta técnica un rasgo prediseñado puede diseminarse deliberadamente a través de una población entera, liberando un puñado de especímenes modificados.
Existirían propuestas, que avanzan apresuradamente, utilizando impulsores genéticos sintéticos con el objetivo de descomponer poblaciones silvestres y domésticas de insectos, mamíferos, peces y otras especies, lo cual arruinaría los ecosistemas y acabaría con la biodiversidad tan importante para nuestra salud afectando también a la agricultura.
Esta técnica que permite rediseñar la vida misma, trastocando el ADN, significa controlarla, moldearla según la ilógica lógica del sistema tecno científico. Y según las psicópatas visiones de la élite.
La Fundación Bill y Melinda Gates ya realizó en su momento experimentos con impulsores genéticos en Burkina Faso. Otra vez sin el conocimiento ni el consentimiento de la población, estos experimentos hechos en laboratorios a cielo abierto, como son en muchas veces los territorios que habitamos y especialmente África, corren el riesgo de descontrolarse y llegar a otros territorios y especies. A nosotros, por ejemplo.